11 abr 2015

Presentando noveles: Jesús Muñoz




BIOGRAFÍA

Nacido en la ciudad de Móstoles (Madrid), es un gran amante de la narrativa y el ensayo. En la actualidad es licenciado en filosofía. A sus 24 años, tiene especial interés en encaminar su trayectoria profesional hacia temas relacionados con teología natural, ciencia y filosofía de la religión. Actualmente está cursando un Máster en la Universidad Complutense de Madrid en "Ciencias de las Religiones", de donde espera seguir extrayendo conocimientos valiosos para su formación. En el año 2014 publicó su primera novela, “Apariencia y verdad” con Ediciones Atlantis.


ENTREVISTA



¿Cuándo comenzaste a escribir?

Escribo desde muy pequeño. Empecé a leer, si no recuerdo mal, a los tres años. Y de ahí derivó mi afición también por la escritura. Pero fue en la adolescencia cuando comencé a escribir cosas que, entonces, consideraba algo más serias. Sin embargo, mis pensamientos estaban en constante cambio, por lo que cuando terminaba algún relato o historia larga, yo me sentía de una manera distinta y, por tanto, no me identificaba con aquel relato o historia que había escrito. Esto me generaba cierta inseguridad, así que nunca llegué a presentar ninguno de mis escritos. Después, tras empezar mis estudios de filosofía en la universidad, decidí que era el momento de volver a intentarlo, de volver a escribir. Y en un camino nada fácil, di por concluida mi obra en febrero del año 2014, que sería publicada cuatro meses después.

¿Cómo te definirías como escritor?

Me defino como un escritor crítico, reflexivo. Creo que esto puede deducirse tras leer mi novela. No me gusta lo simple, la fast read como digo yo. Deseo que el lector se entretenga con la lectura de mi obra, pero que ese entretenimiento no se materialice en el “aquí y ahora”, sino que lo haga suscitando cuestiones que puedan prolongarse en el tiempo.

¿Cuándo comenzaste a escribir y qué te llevó a ello?

La novela comencé a escribirla durante mi primer año de universidad. Tenía dieciocho años. Sin embargo, escribía de vez en cuando, por lo que era difícil terminar escribiendo una novela coherente. No fue hasta el tercer y cuarto año de carrera cuando me puse en serio con ella. Entre construcción y reconstrucción literaria, se puede decir que tardé unos dos años en terminarla. ¿Qué me llevó a escribirla? Necesidad emocional. La escritura, y más hoy, que hay déficit de comunicación (a pesar de la gran cantidad de información de la que disponemos), se presenta como un instrumento de liberación, de sanación si se quiere. Y supongo que elegir una temática y no otra dice mucho del autor; de cuáles son sus inquietudes, sus deseos, etc.

¿Para ti escribir es una profesión o un hobby?

Para mí ha sido un hobby necesario. Como aquél que hace deporte todos los días pero no vive de ello, simplemente pretende mejorar su vida realizando tal actividad. En mi caso vendría a ser lo mismo. Escribo por necesidad, por respeto a mí mismo. Es un hobby que considero de gran importancia. Ahora bien, si pudiese profesionalizarlo sería genial, ya que mi querer y mi deber se encontrarían. ¿Quién no desea algo así?

¿A qué público va dirigida tu obra?

Mi obra va dirigida a un público de entre 16-85 años. Al tratarse de una novela contemporánea de ciencia ficción, los elementos que la componen son accesibles a casi todo el mundo. Al fin y al cabo tenemos una novela de aventuras con crítica socio-política; unos personajes enigmáticos que querremos descubrir; una verdad que querremos desvelar, etc. Todo ello con un lenguaje no muy complicado, narrado en primera persona por el personaje principal, Dioniso.

¿Qué escritor ha marcado tu carrera?

Como soy licenciado en filosofía, los autores que más me han influido son filósofos, así que nombraré a alguno de ellos. El que más ha marcado mi carrera…pues…quizá…uf, ¡qué difícil! Venga va, voy a mojarme: Immanuel Kant.

¿Existe algún tipo de técnica que utilices a la hora de escribir?

No sé si esto responderá a la pregunta, pero mi método es sencillo: a la hora de escribir imagino un escenario concreto, una simple imagen. A partir de ahí voy traduciendo la representación contenida en mi mente con palabras, que a su vez dará lugar a nuevas imágenes y más palabras. Así es como escribo una historia. No sé si a esto se le puede llamar técnica, pero desde luego, es mi modo de trabajar.

¿Leer a otr@s autor@s de tu mismo género literario cuando estás inmerso en la creación de tu obra es positivo o negativo para la misma?

Leer siempre es positivo, da igual en las circunstancias en las que te encuentres. Hay autores que en algún momento de su creación se encuentran atascados y necesitan echar un vistazo a una simple frase de algún libro para recuperar la inspiración. No es mi caso, pero con ello quiero decir que la lectura, en ningún caso, es un obstáculo. Creo que al escribir lo es aún menos.

Cuando escribes, ¿lo haces para ti mismo, o por el contrario piensas en el futuro lector?

Las dos cosas. Como ya he dicho, en primer lugar escribo por una necesidad personal, de liberación. Sin embargo, aquello que escribo quiero compartirlo con el resto de personas, por lo que he de ponerme en el lugar de cualquier otro al leerlo; siendo, eso sí, fiel a mí mismo y a mi estilo.

Por último, cuéntanos un poquito más sobre tu obra.

Mi obra Apariencia y Verdad es una novela futurista en la que se describe una sociedad no deseable. Se cuenta que hubo un desastre en nuestro planeta Tierra (desconocemos qué pasó, aunque iremos descubriendo cosas según vaya transcurriendo la trama), y el protagonista que nos cuenta la historia, Dioniso, describe la sociedad en la que vive (fundada en un lugar que no es la Tierra), distinguiendo diferentes zonas de las ciudades, y a distintos tipos de individuos (Gentiles e Indeseables). En la obra se habla de que dos naturalezas opuestas pueblan el mundo y que el Reino de Apolo se empeña en imponer una de ellas. Iremos descubriendo poco a poco esta sociedad, cómo se fundó y cuál fue su motor o motivo. Conoceremos a extraños personajes, sus ideas, y sus objetivos en un mundo que el lector reconocerá como hostil e injusto. ¿O no?