Título: EL amor me persigue, pero yo soy más rápida
Autor: Elisabeth G. Iborra
Editorial: Esencia
Colección: Esencia contemporánea
Año: 2015
ISBN: 978-84-08-13521-0
Páginas: 384
Precio: 15'90€
Enlace de venta: Planeta Esencia
SINOPSIS
Basta con que quieras alejarte de algo para que el destino se ponga juguetón y te trastoque todos los planes.
Y eso es precisamente lo que le sucede a Mar. Ella, ilusa, pretendía cambiar la ciudad por un bucólico rincón frente al mar para estar sola, pero en lugar de eso, acaba subyugada por David, un jinete del que intentará huir a toda costa.
Desde el primer encontronazo, la tensión sexual no resuelta los transportará por una montaña rusa de casualidades que los llevará desde el encuentro más apasionado al más cómico de los desencuentros.
Cómico para los lectores, ya que, para ellos, quedarse siempre a medias y perderse una y otra vez por las jugarretas que el azar les tiene reservadas no resulta gracioso en absoluto, a pesar de la auténtica jauría de sentimientos en que se convierten sus posteriores reconciliaciones.
PERSONAJES
Mar: es la protagonista. Escritora de bestsellers, se muda a Conil, en la provincia de Cádiz, para encontrarse a sí misma. Pero además de encontrar su paraíso particular encuentra a un jinete sexy que la hace plantearse todas las ideas que se había hecho sobre el amor.
David: veterinario y terrateniente en Conil. Ha cerrado su corazón al amor, cansado de mujeres que quieren cambiarle cuando su relación se torna más seria. Pero una rueda pinchada hace que conozca a Mar, que es una copia femenina de él, y se replantea su forma de vida respecto a las mujeres.
OPINIÓN PERSONAL
Antes de nada quiero agradecer a la Editorial Esencia el envío de ésta divertida novela.
La editora me recomendó ésta novela y la verdad es que no se equivocó en absoluto: ha sido una pasada de lectura.
Mar, cuando termina la gira promocional de su último libro, convertido en bestseller, decide dar un cambio en su vida y vivir un tiempo en soledad. Tras recorrer España de cabo a rabo se decanta por el pueblo gaditano de Conil, donde se dedica a disfrutar de su soledad mientras escribe.
El destino quiere que conozca a David, un hombre prepotente, culto, imaginativo, que alimenta su intelecto como ningún otro lo ha hecho jamás. y también le sube la lívido por las nubes, cosa que le aterra. empezarán una relación, en principio como amigos con derechos, en la que tendrán que amoldarse el uno al otro y descubrir si es sólo pura atracción... o algo más.
La verdad es que el principio de la novela me ha aburrido un poco, porque se centra en el día a día de Mar, en cómo se va amoldando a su vida en el pueblo. Pero en cuanto aparece David (en la página 54) la cosa cambia. Los primeros encuentros entre ellos son una pasada. No he parado de reirme con sus ocurrencias, sus pullitas, sus picadas.
Pero cuando la relación entre ellos empieza a ponerse seria, la cosa cambia. Es entonces cuando predomina la ternura, los miedos, las inseguridades. Me he enamorado del personaje de David. Aunque al principio era un pelín borde y creído, conforme va conociendo a mar se vuelve la cosa más dulce y romántica del mundo. Es guapo, inteligente, tierno, y sexual. Muy muy sexual.
Me he identificado muchiiiisimo con Mar. Aparenta ser fuerte e independiente, pero en el fondo está aterrada de volver a enamorarse y que le vuelvan a hacer daño. Es muy valiente, porque a pesar de que huye unas cuantas veces de David (que tiene más paciencia que un santo) siempre vuelve a intentarlo. Es muy como yo soy.
Su relación está llena de altibajos, siempre por las inseguridades de ella. Y David se arma de paciencia y la busca una y otra vez para calmar sus miedos y hacerle ver que lo suyo puede tener futuro. ¿Se puede ser más tierno?
Me ha parecido gracioso que ambos le oculten al otro sus verdaderos trabajos por miedo, ella a que David la tome por pija prepotente, y él porque ella sólo quiera su dinero.
En éste libro también ha habido una frase que me ha gustado y me ha hecho pensar.
Y es la pura verdad. El amor surge siempre cuando te empeñas en pasar tiempo sola porque necesitas respirar y descansar de las personas del sexo opuesto.
En toooda la novela no dejan de practicar sexo de todas las posturas que te puedas imaginar. Hay veces que la autora suelta alguna palabrita que te hace reir en las descripciones de éstas escenas, pero por lo demás son muy claras sin llegar a ser bordes.
Abundan los diálogos, pero las partes narradas se me hacen un pelín espesas. Aunque me ha gustado el aire español que desprende en su manera de escribir. No me ha parecido copia de nadie, como otras veces. La autora es original, de eso no hay duda.
En cuanto al desenlace... me ha gustado mucho, aunque si es cierto que hay algo que me hubiese gustado de otra manera, pero por lo general perfecto. También he de reconocer que me he quedado con ganas de más, aunque se nota que es una novela única, no da pie a segundas partes. Me hubiese gustado saber qué pasa con los protagonistas después.
En definitiva, ha sido una novela divertidísima, fácil de leer y en la que los personajes se persiguen de una manera adictiva.
Mar, cuando termina la gira promocional de su último libro, convertido en bestseller, decide dar un cambio en su vida y vivir un tiempo en soledad. Tras recorrer España de cabo a rabo se decanta por el pueblo gaditano de Conil, donde se dedica a disfrutar de su soledad mientras escribe.
El destino quiere que conozca a David, un hombre prepotente, culto, imaginativo, que alimenta su intelecto como ningún otro lo ha hecho jamás. y también le sube la lívido por las nubes, cosa que le aterra. empezarán una relación, en principio como amigos con derechos, en la que tendrán que amoldarse el uno al otro y descubrir si es sólo pura atracción... o algo más.
La verdad es que el principio de la novela me ha aburrido un poco, porque se centra en el día a día de Mar, en cómo se va amoldando a su vida en el pueblo. Pero en cuanto aparece David (en la página 54) la cosa cambia. Los primeros encuentros entre ellos son una pasada. No he parado de reirme con sus ocurrencias, sus pullitas, sus picadas.
Pero cuando la relación entre ellos empieza a ponerse seria, la cosa cambia. Es entonces cuando predomina la ternura, los miedos, las inseguridades. Me he enamorado del personaje de David. Aunque al principio era un pelín borde y creído, conforme va conociendo a mar se vuelve la cosa más dulce y romántica del mundo. Es guapo, inteligente, tierno, y sexual. Muy muy sexual.
Me he identificado muchiiiisimo con Mar. Aparenta ser fuerte e independiente, pero en el fondo está aterrada de volver a enamorarse y que le vuelvan a hacer daño. Es muy valiente, porque a pesar de que huye unas cuantas veces de David (que tiene más paciencia que un santo) siempre vuelve a intentarlo. Es muy como yo soy.
Su relación está llena de altibajos, siempre por las inseguridades de ella. Y David se arma de paciencia y la busca una y otra vez para calmar sus miedos y hacerle ver que lo suyo puede tener futuro. ¿Se puede ser más tierno?
Me ha parecido gracioso que ambos le oculten al otro sus verdaderos trabajos por miedo, ella a que David la tome por pija prepotente, y él porque ella sólo quiera su dinero.
En éste libro también ha habido una frase que me ha gustado y me ha hecho pensar.
El amor es lo que pasa cuando estás haciendo planes de todo lo contrario
Y es la pura verdad. El amor surge siempre cuando te empeñas en pasar tiempo sola porque necesitas respirar y descansar de las personas del sexo opuesto.
En toooda la novela no dejan de practicar sexo de todas las posturas que te puedas imaginar. Hay veces que la autora suelta alguna palabrita que te hace reir en las descripciones de éstas escenas, pero por lo demás son muy claras sin llegar a ser bordes.
Abundan los diálogos, pero las partes narradas se me hacen un pelín espesas. Aunque me ha gustado el aire español que desprende en su manera de escribir. No me ha parecido copia de nadie, como otras veces. La autora es original, de eso no hay duda.
En cuanto al desenlace... me ha gustado mucho, aunque si es cierto que hay algo que me hubiese gustado de otra manera, pero por lo general perfecto. También he de reconocer que me he quedado con ganas de más, aunque se nota que es una novela única, no da pie a segundas partes. Me hubiese gustado saber qué pasa con los protagonistas después.
En definitiva, ha sido una novela divertidísima, fácil de leer y en la que los personajes se persiguen de una manera adictiva.
Puntuación angelical...